Whitesnake es una banda británica de hard rock y heavy metal fundada en el año 1978 por David Coverdale después de su separación de la banda Deep Purple, donde formó parte durante el periodo 1973-1976. Durante sus primeros años, su música estaba esencialmente orientada hacia el Rock, el Blues y el Soul.
En febrero de 1978 David Coverdale y el guitarrista Micky Moody, que había colaborado con Coverdale en sus dos discos solistas, formaron Whitesnake. El resto de la alineación incluía al guitarrista Bernie Marsden, el bajista Neil Murray, el batería David Dowle y el tecladista Brian Johnston (luego remplazado por Pete Solley). En abril de ese mismo año, saldría su primer álbum Snakebite con el nombre de David Coverdale´s Whitesnake. El primer álbum propiamente dicho de Whitesnake, saldría el mismo año, bajo el nombre de Trouble. El tecladista del disco era un ex-compañero de David Coverdale en años en Deep Purple, Jon Lord. Entre los temas del álbum, saldrían clásicos como Take me with you, Trouble, Lie down y una buena versión del tema de The BeatlesDay Tripper.
Mayor éxito llegaría con el álbum de 1979, Lovehunter, que contenía temas como Walking In The Shadow Of The Blues, Medicine Man y el que da nombre al disco. Aunque el álbum más memorable de esta época fue sin duda Ready an' willing de 1980, en el que el baterista David Dowle, ya no estaría presente; en su lugar entra otro ex-compañero de Coverdale en Deep Purple: Ian Paice. Con este disco llegaron a lo más alto de las listas, con temas como Fool for your loving y Blindman.
Con la gira de "Ready an' willing", se atreverían a sacar un doble disco en directo, grabado en el Hammersmith de Londres en noviembre de 1978 y junio de 1980. En el disco combinarían todas sus grandes canciones de la época.
En 1981 editan otro álbum: Come an'get it muy del estilo de Ready an' willing, con canciones como Don't break my heart again, Come an'get it. Al año siguiente graban un álbum, que se editó finalmente a mediados de 1982, Saints & Sinners, con el que consiguieron uno de sus más grandes éxitos: Here I go again, el cual se convirtió en un clásico del grupo. En este momento las diferencias entre los integrantes y una enfermedad de la hija de Coverdale provocan un impasse en la banda. Cuando regresan ya no está más el guitarrista Bernie Marsden, que fue el primero en marcharse, seguido de Ian Paice y Neil Murray. En octubre de 1982 presentarían la nueva formación: el guitarrista Mel Galley (ex Trapeze), el bajista Colin Hodgkinson y a la batería entraría el legendario Cozy Powell (ex-Jeff Beck, Rainbow, Black Sabbath y muchas más…).
Durante los últimos meses de 1982 y primeros de 1983 realizarían la gira del "Saints & Sinners" y a finales de 1983 y principios de 1984 grabarían "Slide it in" (que contenía temas como "Love Ain't No Stranger" y el mismísimo "Slide it ‘in"). Antes de empezar la gira el guitarrista Micky Moody abandona también la banda y sería sustituido por John Sykes (ex-Thin Lizzy). Durante la gira vuelve Neil Murray y con la formación renovada, Whitesnake se presenta en el primer Rock in Rio, el de 1985, con éxito. Para finales de 1986, la banda estaba compuesta por John Sykes en la guitarra, Aynsley Dunbar en la batería y Neil Murray en el bajo. Con el agregado de Don Airey en los teclados, grabarían 1987, el álbum más conocido y vendido de su historia, editado obviamente ese año. Whitesnake consigue el tan deseado megaestrellato en Estados Unidos, pero su estilo musical vira unos grados en dirección del hard rock más comercial de la época y en la misma medida se aleja de sus raíces más blueseras.
Para desazón de los fans y la prensa, Coverdale expulsa a su guitarrista estrella John Sykes (se especuló con que los motivos eran la disputa del protagonismo escénico) e ingresan Adrian Vanderberg y Vivian Campbell (ex-Dio) en su reemplazo, Rudy Sarzo (ex-Quiet Riot) se hace cargo del bajo y Tommy Aldridge de la batería. En 1989, grabarían Slip of the Tongue, en el que Steve Vai (ex-Alcatrazz y David Lee Roth) reemplaza a Campbell y participa de la grabación en el estudio (ya que el guitarrista Adrian Vandenberg se lesionó relizando unos ejercicios, provocandole estos Tendinitis). Al finalizar la gira en 1990, la banda prácticamente se desmembra.
A fines de 1993 Coverdale y el emblemático guitarrista de Led Zeppelin, Jimmy Page, editan un álbum llamado simplemente "Coverdale-Page", que rápidamente se transformó en superventas, pero que tuvo una fría recepción por parte de la prensa "nostálgica", que clamaba por una reunión de Led Zeppelin, que finalmente se concretaría al año siguiente con la edición del disco "No Quarter" de Jimmy Page y Robert Plant.
Un álbum recopilatorio Greatest Hits se publica en 1994; en él se encuentra una nueva versión de "Here I go again". La banda retomaría la actividad con Warren DeMartini (ex-Ratt) y Adrian Vanderberg en guitarras, Rudy Sarzo en bajo, Paul Misckovick en teclado y Denny Carmassi en batería. En 1997, publicarían "Restless heart", que causó un impacto mínimo en comparación con las expectativas y ni siquiera fue editado en los Estados Unidos. Posteriormente, se publicó un acústico titulado Starkers In Tokyo interpretado por Coverdale y Adrian Vandenberg únicamente, que contenía temas de toda la época de Whitesnake más Soldier of Fortune de Deep Purple. Coverdale decidió desarmar la banda y continuar su carrera como solista. La "Farewell Tour" (gira de despedida) terminó en Argentina, en el estadio de Ferro Carril Oeste (12 diciembre de 1997) de manera muy emotiva pero bajo una lluvia de críticas acerca del bajo rendimiento vocal del cantante.
En septiembre del 2000 salió un álbum solista de David Coverdale titulado Into the Light, que tampoco obtuvo buenos comentarios.
En 2003 Whitesnake se reagrupó para la gira de conmemoración de su 25 aniversario. La banda sigue realizando giras, ha editado un DVD en vivo en 2005 de la gira de 2004 y un par de recopilatorios en 2006. La formación actual es: David Coverdale voz, Doug Aldrich (ex-Bad Moon Rising y Dio) y Reb Beach (ex-Winger y Dokken) en guitarras, Tommy Aldridge en batería, Marco Mendoza en bajo y Timothy Drury en teclados.
En noviembre de 2006 salió su último disco "Live... in the shadow of the blues" con 4 temas inéditos: All I want is you, Dog, If you want me y Ready to Rock. La promoción del disco se ha hecho mediante conciertos acústicos en distintas ciudades europeas.
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ES HORA DE HABLAR DE ROCK
Breve Genesis
El ritmo rebelde cumple medio siglo
El génesis
Préndete, sintonízate y elévate.
Los años 60. Decadencia, excesos y hedonismo.
Los años 70.De todos colores y sabores.
Los años 80. Entre el cielo y el infierno. Los años 90.
El 5 de julio de 1954, un chofer de camioneta de 19 años de edad cambiaría el curso de la música y de la historia al entrar a un pequeño estudio de grabación en Memphis a realizar tres canciones. Entre esos tres temas que grabó un tal Elvis Aaron Presley se encontraba uno de nombre That's All Right, el cual marcaría el nacimiento no sólo de un nuevo género musical sino el de una forma de expresión artística, social y cultural, además de un estilo de vida: el rock and roll.
Quién iba a pensar que aquella música que fusionaba el sonido country de los blancos y el rhythm and blues de los negros, seguiría vigente 50 años después –cuando en sus inicios no le daban más allá de cinco años de vida-, y que aquél joven nacido en Tupelo, Mississippi un 8 de enero de 1935, se convertiría nada menos que en el Rey del rock, además de en la figura más importante e influyente de la música popular en el Siglo XX.
A lo largo de estos 50 años, el rock ha sido dado por muerto y se ha levantado de las cenizas en varias ocasiones, pero al parecer las palabras dichas algún día por el Rey se convirtieron en una profesía: "No creo que (el rock and roll) muera alguna vez por completo, porque van a tener que hacer algo extraordinariamente bueno para que tome su lugar".
Rebeldes con causa. Los años 50.
A pesar de que "oficialmente" se marca el nacimiento del rock and roll con la grabación That's all right, de Elvis Presley, históricamente tanto la música como el nombre surgieron poco tiempo antes. Para muchos historiadores, el amanecer del género se dio con la canción Rock around the clock, de Bill Haley and his comets, que fue grabada el 12 de abril de 1954 -tres meses antes que el Rey hiciera historia.
En tanto, el término "rock and roll" (expresión del slang de los negros para referirse al acto sexual) lo empezó a utilizar el locutor de radio Alan Freed en 1952 para definir algunas canciones que tocaba en su programa, como Rock the joint, precisamente de Bill Haley, y también en los festivales que empezaba a realizar donde presentaba grupos que interpretaban R&B.
Sin embargo, el hecho de considerar a Elvis como el creador, principal promotor y Rey del rock, tiene mucho que ver con su personalidad, con su voz, con su carisma y con lo que desde un inicio representó no sólo para la música sino para la cultura popular de entonces, rompiendo esquemas y trasgrediendo tradiciones morales y de conducta.
Pero no todo en la década de los 50 giró en torno a Elvis, pues el rock and roll vio nacer otras figuras importantes y trascendentales a los que les tocaría escribir capítulos muy importantes en el génesis de su historia.
Dentro de esa lista, que podría ser muy larga, destacan personajes básicos como Chuck Berry, Little Richard, Bo Didley, Buddy Holly, Jerry Lee Lewis, Fats Domino, Roy OrbisonEdie Cochran y The Everly Brothers, entre muchos otros.
El auge de esta primera generación del rock and roll se dio hacia 1956-57, y sería el mismo Elvis el que marcaría su decadencia cuando en 1958 se enroló en el ejército de los Estados Unidos, donde permanecería hasta 1960. Si bien a su regreso su popularidad seguía por los cielos, su música dejó de tener esa carga de rebeldía y frescura con la que se identificaron años antes los jóvenes. El rock estaba listo para sufrir su primera metamorfosis.
Luego de la decadencia de los primeros ídolos del rock and roll a finales de los años 50, la estafeta la tomaron los artistas de color, quienes a principios de los 60 pusieron a bailar a todo mundo con su sonido Motown, una celebración de R&B, soul y funk.
De esa oleada de artistas se recuerdan, entre muchos otros a The Supremes, The Marvelletes, The Shirelles, Marvin Gaye, Stevie Wonder y el padrino del funk, James Brown, que le dieron un nuevo sentido a la música pop con su frescura y alegría.
Pero bastaría con que la década dejara pasar cuatro años para que un nuevo movimiento, con dimensiones y repercusiones tan grandes como las del nacimiento del género, se presentara. Con la llamada "invasión inglesa" la música británica se hacía presente y, como ocurriría de ahí en adelante, demostraría que a partir de ahí irían siempre un paso adelante a lo que se creara en Estados Unidos.
Entonces el mundo entero vibró a ritmo de The Kinks, The Animals, The Who, The Zombies, The Shadows, The Hollies y, por supuesto, con The Beatles y The Rolling Stones, las dos bandas más importantes e influyentes en la historia del rock.
En tanto, en Estados Unidos la respuesta llegaría unos años después, cuando pasada la mitad de la década el rock ácido y la psicodelia se apoderaría de la escena y traería un nuevo movimiento al rock, quizá el más trascendente y de gran repercusión social y cultural.
Luego de que Bob Dylan decidiera dejar un poco el folk y electrificar su música, una gran generación de bandas estadounidenses empezaron a crear un movimiento que años más tarde, en 1969, desembocaría en la llamada “nación Woodstock”, un festival de tres días de duración que convocó a cerca de medio millón de personas.
De esa generación destacan Jimi Hendrix (considerado como el mejor guitarrista de rock de todos los tiempos), Janis Joplin, The Doors, The Jefferson Airplane, The Greateful Dead, The Byrds, Country Joe & The Fish, y una serie de grupos provenientes principalmente de la Costa Oeste de los Estados Unidos.
Con el Festival de Woodstock, realizado en Woodstock, Nueva York en 1969, esa generación del "peace and love" vivió su momento utópico, su punto álgido, pero a la vez marcó el inicio del fin, que ocurrió meses más tarde con el concierto gratuito que The Rolling Stones ofrecieron en Altamount, California, en donde un joven de raza negra fue cruelmente acribillado y asesinado por la pandilla de los Hell's Angels, paradójicamente contratados por los Stones para encargarse de la seguridad. El sueño había terminado.